En La Fuente de San Esteban las vacas avisan al ganadero por mensaje de móvil de que en una hora van a parir

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Ángel Santiago muestra un termómetro vaginal (izq) y un collar con sensor.


LA FUENTE DE SAN ESTEBAN / CARLOS GARCÍA

El ganadero de La Fuente de San Esteban, Ángel Santiago García, ha puesto en marcha un sistema novedoso en España que le permite recibir mensajes en su teléfono móvil para advertirle de que sus vacas acaban de entrar en celo o que en una hora van a parir.

Se trata de una iniciativa pionera con tecnología importada de Francia, que puede ser de gran utilidad para los ganaderos que se dedican, como el caso de Ángel Santiago García, a la cría y mejora genética de la raza de charolés, un tipo de ejemplar vacuno de gran rendimiento cárnico.

El proyecto, que cuenta con el auspicio y la colaboración de la Universidad de Salamanca y la Diputación Provincial, lo ha puesto en marcha en su explotación de La Fuente de San Esteban con una serie de novillas primerizas.

Para mejorar el sistema de reproducción, las novillas portan en el cuello una especie de collar a modo de cencerro, donde va colocado un dispositivo con un sensor.

"En el primer mes, el sensor crea un patrón de movimiento del animal para diferenciar los días en los que está en celo", explica  el titular de la explotación.

De esta manera, el sensor del collar de la vaca envía los datos vía "wifi" a una estación local creada en la propia finca y desde ahí se mandan al móvil del ganadero mediante una aplicación desarrollada para teléfonos "smartphone", que ha sido adaptada por informáticos de la Universidad de Salamanca.

El ganadero recibe un mensaje en su móvil el día en que el animal entra en celo y, así, "sabemos con exactitud el día que acaba el celo, ya que la inseminación hay que hacerla justo a celo pasado, que es el momento óptimo".

Esta aplicación permitirá ahorrar muchos costes a los ganaderos, explica el profesional, ya que, controlando con exactitud el celo de la novilla, no se pierden tantas dosis de semen, que llegan a costar, como mínimo, 50 euros.

Aunque esta aplicación se desarrolló hace algunos meses en ganaderías de intensivo (estabuladas) de Francia, "es la primera vez que se pone en marcha con animales sueltos por el campo, en régimen extensivo", aclara Ángel Santiago.

Otra de las novedades tecnológicas que se han puesto en marcha a través de este proyecto son los termómetros vaginales, que sirven para que el ganadero sepa en todo momento cómo va el proceso de gestación.

Quince días antes del parto, el ganadero coloca el termómetro vaginal en el animal que, a su vez, al igual que en el sistema del collar, informa mediante la aplicación móvil de la temperatura.

"Cuando hay una bajada considerable de temperatura, la aplicación te avisa de que el parto tendrá lugar en 48 horas, y, cuando el termómetro es expulsado, te llega un mensaje advirtiéndote de que el animal va a parir en una hora", afirma el dueño de las novillas.

Esto es importante, ya que hay que estar pendiente de los partos de las vacas, más aún en novillas primerizas.

De momento, todos los ensayos han resultado satisfactorios y el ganadero se muestra muy contento, ya que con el primer parto de una vaca a la que le habían colocado el collar y el termómetro vaginal todo salió muy bien.