Aritz Marcos ha recibido el alta médica a las dos y media de la tarde de este lunes, 19 de enero, tras pasar toda la noche hospitalizado en Salamanca, debido a la patada en la cabeza que le propinó un aficionado del Béjar, que le originó vómitos y fuertes dolores de cabeza, tras el encuentro, que fue muy bronco, con tintes racistas hacia el jugador del CD Ciudad Rodrigo, Marcial, y con demasiados altercados impulsados por la afición bejarana.
Tras el alta médica, el director deportivo del Ciudad Rodrigo, ha asegurado a este medio que "hay que perdonar a las personas, es una acción que no se debe permitir en el fútbol".
Sobre el aficionado también ha sido contundente: "Lo único que pido es que, como toda la afición del Béjar sabe quién es esta persona, que no lo dejen entrar más, que lo echen de socio".
Aún así, a pesar de las cefaleas por la patada que recibió en la coronilla, Aritz Marcos ha confesado que lo que más le dolío fueron los insultos racistas que desde el primer minuto de partido recibió el delantero mirobrigense Marcial, de piel negra.
