ENTRE ROBLES
(Ir Versión Habla de El Rebollar)
Verano
Seguramente no hace falta que os lo diga pero, por si hay algún despistado, tenemos el verano muy cerca. y son muchas las cosas nuevas que nos trae esta época del año, aunque lo que seguramente primero vemos es que los días son más largos, las noches más cortas y hace mucho más calor.
El verano
comienza el día 21 de junio, día que recibe el nombre de Solsticio de Verano.
Es el día del año con la noche más corta y el día más largo. De aquí en
adelante, los días empiezan a menguar. Los antiguos tenían a este día como algo
importante, pues comienza un ciclo natural, el verano, que dura tres meses y
desemboca en el otoño. No es casualidad que hoy día se celebren muchas fiestas
alrededor de este día, fiestas que hemos heredado de los antiguos y que hoy día
celebramos disfrazadas de fiestas a santos como San Silverio (en Peñaparda) o
San Juan (otros pueblos como Robleda, El Payo o Navasfrías).
Tampoco es
casualidad que en esta época, casi siempre unidas a las fiestas de los pueblos,
todavía se conserven tradiciones que vienen de muy antiguo, como el levantar el
pino el día de la fiesta, o la hoguera que se hace en muchos pueblos, o los
ritos relacionados con el agua. Unos ritos que tienen que ver con el paso de
niño a hombre (el pino). Otros, ritos de purificación (fuego y agua), Todos
conservados desde antiguo, todos patrimonio del pueblo, y todos ritos que
tienen que ser conservados.
Es tiempo
también de defender otras tradiciones. Aunque soy de los que piensan que no
hace falta un día especial para defenderlas, sino que tiene que ser cosa de
todo el año. Pero en esta época comienzan a verse por nuestros pueblos los
trajes de charro, los tamborileros, bailadores,... Se empiezan a hacer los
festivales de verano, y la música tradicional brilla como el sol del verano.
Por eso, es curioso que en una comarca como la de El Rebollar, tan rica en
cultura tradicional, en sones, bailes, trajes e instrumentos, no haya nada
relacionado con el folklore en ninguno de los cuatro pueblos que celebran sus
fiestas este mes. Y que, teniendo una lengua propia (la “palra d’El Rebollal”, variedad local de la lengua leonesa),
ninguno de los cuatro pueblos haya sacado los carteles de las fiestas en su
lengua,...
Éste también es
tiempo de paseo por el campo, de reunirse con la familia, los amigos, de llenar
las calles de gente y de tomarse algo fresquito o darse un baño (el calor nos
invita a ello). Y es que, más en esta época que en ninguna otra, nuestros
pueblos están llenos de vida. Los que están fuera vuelven a casa. Unos, desde
la capital de provincia. Otros, desde otros lugares de España como Madrid o el
País Vasco. Otros, desde todavía más lejos, como Francia. Pero todos con ganas
de descansar, de ver a los que normalmente tienen lejos y de hacer un montón de
cosas que no pueden hacer el resto del año.
El caso es que
el verano es una época especial, una época para disfrutar. Desde aquí os deseo
que paséis un buen verano.