San Felices, más de cinco siglos de culto a la Santa Cruz

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Dos mayordomas conl a mantilla de trotadoras ante el Nazareno
San Felices ha revivido este fin de semana sus más de cinco siglos de devoción a la Santa Cruz y lo han hecho como mandan los cánones de la tradición, aunque con algún añadido, como el baile charro que han danzado ante el Nazareno, a la salida de la ermita.
El nazareno es de autoría anónima, a buen seguro que de la Escuela de Gregorio Fernández, y, según la historia de San Felices, en el siglo XV no se procesionaba más que la Cruz, que en el siglo XVII fue cambiada por el Nazareno.
La historia del Cristo Nazareno alcanzó su cenit cuando, al parecer, Francisco Barahona, un impedido, fue curado por este cristo a principios del siglo XX en un acto milagroso (más tarde fue asesinado en Paracuellos durante la Guerra Civil). 
Este evento propició que San Felices fue lugar de destino de peregrinación, especialmente de vecinos de Portugal, de ahí que su Cofradía, la de Jesús Nazareno, obtuviera unos ingresos muy cuantitativos.
En el día de hoy, las mayordomas del Cristo acudieron ataviadas con el Traje Charro de Boda, donde sobresale la Mantilla de Rocadoras, de color negro.
Julio "El Serrano" ha sido el tamborilero encargado de los sones durante todos los actos litúrgicos.
La Cofradía de Jesús Nazareno, a lo largo de la historia de este pueblo, mantuvo serias disputas con la otra cofradía del pueblo, ya extinta, del Santísimo. 
Tal fue la pugna que la disputa por la colocación de las insignias en una Semana Santa en el siglo XV llegó la Tribuna eclesiástico de la Rota.

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Mayordomas con el tamborilero Julio El Serrano, vestidas con el traje de boda charro

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Baile Charro ante el Nazareno

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