Las Flores del Campo

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ENTRE ROBLES

(Ir versión habla de El Rebollar)

Las Flores del Campo

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         ¡Qué bonitas son las flores! Las hay de todos los colores: blancas, amarillas, azules, rojas,... Las hay a la orilla de los caminos. Las hay al lado de los arroyos,... Y ver las vacas en el prado con sus becerros. Y ver a las cabras con sus cabritillos, y a las ovejas con sus corderitos, y a las gallinas con sus polluelos, y a la burra con sus crías,... ¡Pero qué bonito todo!

         Hace sol, los pajaritos cantan, las nubes se levantan, y todos corren por las calles alegres y contentos: los niños, sus padres, sus abuelos,... ¡Qué mundo tan maravilloso! ¡Qué mundo tan bonito!

         Y es verdad. Nuestro mundo es maravilloso pero, aunque a alguna gente le gustaría que sólo se hablase y se viese lo que he escrito en las líneas anteriores, y que sigamos ciegos sin ver todo lo que pasa a nuestro alrededor, las cosas no son así, como nos las quieren pintar. Y los que las vemos de otro color al que nos venden no debemos callar.

         Pues sí, es verdad que las flores son muy bellas. Es verdad que las hay de todos los colores. Igual que las opiniones de la gente. ¿Os imagináis que en el campo todo fuese de un único color? Pues entre la gente tampoco. Y tiene que ser así. Si no fuese así, acabaríamos en un mundo parecido al que describió Aldous Huxley en su libro “Un mundo feliz”, un mundo en el que la gente ya nacía programada para ser rica o pobre, médico o agricultor,... Sin oportunidad de ser otra cosa. O como en la película “Gattaca”, donde a algunos puestos no podían optar más que aquellos que tuviesen los genes perfectos. O como en otra película (también libro), “Fahrenheit 451” en el que estaban prohibidos los libros porque, según el gobierno, leer hacía que los hombres empezasen a ser diferentes en vez de ser todos iguales, de manera que se prendían todos los libros para quemarlos y hacerlos desaparecer...

         ¿Estamos tan lejos de esos mundos inventados? Quizá no. Hoy día nos quieren vender un mundo bipolar. Parece que todo tiene que ser blanco o negro, claro y oscuro. En el fútbol, parece que sólo existen el Madrid y el Barça cuando tenemos otros equipos como el Atlético, el Valencia, el Athletic de Bilbao,... O, por qué no, el Ciudad Rodrigo. Un montón. Con la política quieren hacer lo mismo. ¿Sólo existen el PP y el PSOE? Pues no. También tenemos la UPS, IU,... O, por qué no, el PREPAL. ¿Es que en este país sólo se habla una lengua? Tampoco. Además de la oficial del Estado tenemos el gallego, el euskera, el catalán (estas tres también son oficiales) y otras como el aragonés, el leonés (dentro de la que está nuestra “palra d’El Rebollal”, el asturiano, el extremeño, el “patsuezu”,...), el aranés, la “fala del Val de Xálima”,... Sin ir más lejos, en la comarca de Ciudad Rodrigo se hablan tres: portugués, leonés y castellano.

         Podríamos seguir así “hasta el infinito y más allá”, como decía aquel. Aunque nos quieran vender un mundo de cara o cruz, un mundo en blanco y negro, a mi me parece mucho más bonito un mundo con todos los colores, como el arco iris. Amigos, las flores del campo, igual que nuestro mundo, son bonitas porque tienen todos los colores. No os dejéis avasallar, ni le hagáis caso a los que quieren quitar los colores de nuestro alrededor. Porque sin ellos, sin los colores, el mundo sería mucho más feo.