"La Colete Encarnada", una asociación que une a los pueblos de La Raya entre España y Portugal

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Última celebración en "La Colete Encarnada" de Vilar Formoso con presencia hispanolusa
Los pueblos de La Raya, la que forman los municipios del Campo de Argañán y las localidades del concejo de Almeida, mantienen viva, a pesar de la grave despoblación que sufren estas aldeas lusas y salmantinas, la tradición de compartir eventos entre vecinos de ambos países, que se conocen por las relaciones agroganaderas que a lo largo del tiempo han mantenido.
A pesar de que estas relaciones se van perdiendo por las generaciones nuevas, todavía existen reductos como la Peña denominada "La Colete Encarnada", que esconde un halo de romanticismo y de tradición que se puede palpar en cada uno de los rincones de su sede, ubicada en el propio pueblo de Vilar Formoso, junto a la ribera que atraviesa este pueblo.
La Colete Encarnada fue creada hace una década por vecinos de algunos pueblos del Campo de Argañán como La Alameda de Gardón, y de otras localidades del concejo de Almeida e, incluso, del distrito de Guarda.
El objetivo, reunirse para pasar jornadas de diversión, que sirven, sin duda alguna, para estrechar lazos entre dos países: España y Portugal; separados de forma artificial por la frontera más vieja de Europa, aunque unida por ese espíritu que aún sobrevive en La Raya bajo el denominador común del contrabando, un oficio que, por fortuna, unió a los pueblos fronterizos, los hermanó y, gracias a este noble trabajo, hoy las gentes de La Raya se conocen a la perfección, sin que medien fronteras.
"La Colete Encarnada" se traduce al castellano como "El Chaleco Rojo", que no es otro que el típico chaleco rojo que a lo largo de la historia usaban los mayorales de las ganaderías de bravo ubicadas en Portugal.
Una vez más, la cultura de los toros une España y Portugal y este peña, que no es más que un símbolo, es capaz de unir a españoles y portugueses para todo tipo de celebraciones.
Eso sí, lo que nunca falta son los típicos sones del acordeón, tan arraigado en nuestro vecino país de Portugal.
"La Colete Encarnada" es una muestra más, como ocurre también con la Peña Taurina Hispanolusa de aficionados de Fuentes de Oñoro y de Vilar Formoso, de que La Raya permanece viva, con tradiciones comunes que no entienden de frontera.