Los seis toros de la ganadería de Adolfo Martín han protagonizado un encierro rápido, vistoso y divertido para los mozos y en la enfermería han sido atendidas dos personas, aunque ninguna por asta de toro.
Los bravos llegaron casi unidos hasta El Registro. Cinco llegaron arropados y un sexto entró lago más rezagado.
Ha sido el encierro más rápido del Carnaval del Toro.
Ya en la Plaza, los bravos han ofrecido buen juego y, sobre todo, han impuesto su ley, ya no eran muchos los que se atrevían a citarlos y recortarlos.
El toro, imponiendo su ley en el coso mirobrigense