Opino, que no sentencio

Este febrero ha comenzado con una noticia triste para Ciudad Rodrigo. La Oficina de Turismo de la Junta de Castilla y León que estaba situada en la Plaza de Amayuelas ha echado el cierre.

Ciudad Rodrigo contaba hasta el pasado día 1 con tres oficinas de turismo. Dos de ellas son municipales, una situada en los bajos del Ayuntamiento y otra en el Centro de Recepción de Visitantes de la Avenida Sefarad. La tercera es la que nos ocupa, cuya gestión correspondía a la la Junta de Castilla y León. Esta oficina, era la única que no cerraba ningún día del año (exceptuando Navidad y Año Nuevo) y durante 2013 registró del orden de 63.000 visitantes.

Para cualquier municipio es perjudicial el cierre de una oficina de turismo, pero para Ciudad Rodrigo puede ser catastrófico que esto suceda. Por un lado, pretendemos que gran parte de la producción económica gire en torno al sector turístico, cosa que, con el potencial histórico y monumental de nuestra querida Miróbriga, es muy acertado, y por el otro, se cierra una oficina de turismo sin motivo justificado (hasta el momento), ya que, con los datos ofrecidos por la propia oficina, es difícil pensar que la inactividad fuese parte de su problema.

Es de responsabilidad municipal y también regional facilitar al viajero que ponga un pie en Ciudad Rodrigo todo tipo de actividades que puede desarrollar en el municipio y su comarca y ofrecerle las innumerables opciones tanto monumentales como comerciales de los que muchos mirobrigenses vivimos, y ésa constituye básicamente la labor de las oficinas de turismo . Para más inri, este 2014 es año Franciscano, “leitmotiv” de la participación de Ciudad Rodrigo en FITUR hace apenas 15 días, por lo que se espera una cantidad mayor de visitantes que en años ordinarios para los que cualquier ayuda es poca para que se queden totalmente prendados de nuestra ciudad.

Con el cierre de esta oficina se pone fin a casi 40 años que llevaba en funcionamiento. Dentro de las murallas únicamente quedará operativa la oficina de los bajos de la Casa Consistorial, que si mantiene sus horarios, seguirá cerrando los domingos. Pero por el bien de todos, Ciudad Rodrigo no se puede permitir ni un solo turista dominical sin atender debidamente, por lo que el Ayuntamiento debe cubrir las carencias de información al viajero que tras este cierre se produzcan.