Una vez más el Ministro de
Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente de España, Sr. Cañete atenta contra
los intereses de Castilla y León, y más concretamente contra los intereses de
Salamanca.
Cuando conocimos el primer
borrador de la propuesta de norma de calidad del Ibérico en junio de 2012, nos
pusimos a trabajar intensamente, y en el
Pleno de las Cortes debatimos y consensuamos en dos ocasiones una postura común
contra esta modificación de la norma.
En algunas cosas parece que
sí ha hecho caso a los indicaciones de Castilla y León (periodo transitorio, de
su puesta en práctica, fundamentalmente), pero no así en el tema del
etiquetado.
A este respecto, hay que
hacer varias matizaciones:
El jamón Pata Negra, es todo
jamón ibérico que lo tiene, y no como este caso, que solamente puede utilizar
este término el jamón de bellota 100% ibérico, por cierto una línea de
producción muy escasa en España, y en Castilla y León, pero que sí tiene cierta
influencia en Huelva. Parece que al ministro le ha importado más los intereses
muy particulares.
Por otro lado, respecto del
etiquetado, al distinguirlo con colores, y sobretodo el tamaño de la letra a
utilizar, puede confundir al consumidor, haciéndole pensar que hay jamones de
primera, de segunda, de tercera y de cuarta categoría, cuando el jamón ibérico
que se produce fundamentalmente en Castilla y León y en Salamanca, es de
primera calidad, y con este etiquetado va a parecer que no.
Dicho lo anterior, no se
pretende engañar al consumidor, llamando ibérico a todo lo que se produzca,
pero no se puede confundirle tampoco, rebajando comercialmente las categorías
del mismo.
Siendo Castilla y león la
Comunidad Autónoma más importante en cuanto a la producción de productos
ibéricos, y concretamente el jamón, es difícil de entender que no hayamos sido
un interlocutor principal, sino que intereses “más pequeños” han tenido más interlocución.
Esto no es más que un agravio más del Ministro con
Castilla y León, nos ha defraudado con la norma del ibérico, pero sigue
engañándonos con los Fondos de Desarrollo Rural y las deudas a los Agricultores y Ganaderos, que ya superan los 100 millones
de euros, en planes de mejora, primera instalación, indemnizaciones, promotores
de empresas, etc.
O su despotismo en cuanto a
su actitud en la definición de agricultor activo, para poder ser perceptor de ayudas
Pac.
También nos preocupa la
escasa capacidad de influencia del Gobierno de Castilla y León y del PP de
Castilla y León en el Gobierno del Sr. Rajoy, o los desencuentros entre el Sr.
Cañete y la Sra. Clemente, que nos están
perjudicando
ampliamente.