Entre Robles

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Nuestros vecinos

(versión lengua de El Rebollar)


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Las personas que vivimos en la comarca de Ciudad Rodrigo vivimos en una comarca especial. Me parece que en eso estamos de acuerdo todos. Especial para lo bueno y para lo malo. Especial por su cultura. Especial por su historia. Especial por su naturaleza. Y especial por el lugar donde se encuentra, en Extremadura y Portugal como vecinos.

         El caso es que, igual que pasa en el trato entre personas, el trato entre tierras vecinas tampoco es muchas veces como tendría que ser, y no son pocas las veces que nos damos la espalda entre vecinos. Y son muchas las cosas por las que estamos unidos a nuestros vecinos extremeños y portugueses, más de las que pensamos.

         Por empezar por algún sitio, vamos primero a Extremadura. Dentro de la comarca de Ciudad Rodrigo, somo las gentes de El Rebollar (aunque no sólo nosotros) los que m,ás trato hemos tenido con los extremeños. Tratos no sólo económicos (que siempre los ha habido), sino también culturales. El “jurdanu” es, como el habla de El Rebollar, un habla leonesa y, dentro de las hablas leonesas de Extremadura (ahora metidas todas en el término “estremeñu”), es la más parecida a la nuestra. El pueblo de Villasrubias comparte con la gente de Cáceres el gentilicio de “mangurrinus”. Mucha gente de Extremadura vino a vivir y casarse al norte de la Sierra de Gata y, al revés, también fue mucha gente de este lado de la sierra la que bajó a vivir y casarse a Extremadura...


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Castillo de Trevejo

         ¿Y qué decir de la historia en común? Todo el noroeste de Cáceres fue reconquistado y repoblado a la vez por el Reino de León, en tiempos de Fernando II. Este rey leonés cedió a las órdenes militares los pueblos de Villasrubias (Orden de San Juan) y Navasfrías (Orden de Alcántara). Villasrubias estaba bajo la encomienda de Trevejo, Navasfrías bajo la encomiena de Eljas,... Por esa época lo que hoy día es la provincia de Salamanca fue la primera Extremadura (Extremadura=al otro extremo del Duero) y la que hoy día llamamos Extremadura era conocida como la Transierra (Transierra=más allá de la sierra). Pero todavía hay más. Los pueblos de Villamiel, Trevejo, San Martín de Trevejo, Descargamaría, Robledillo y Puñoenrostro (este ya desaparecido) estuvieron, hasta el año 1833 (en que se crearon las provincias) en el Partido Judicial de Ciudad Rodrigo. Y todo el noroeste de Cáceres, antes de estar en la diócesis de Coria, perteneció a la diócesis de Ciudad Rodrigo hasta mediados del siglo XX...


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Castillo Sabugal

         ¿Y qué podemos decir de Portugal? Además de ir al mercado de Vilar Formoso, el contrabando del siglo XX fue el otro gran motivo económico que nos ha unido con el país vecino. Pero, al igual que pasa con Extremadura, es mucha la cultura y la historia que hemos corrido juntos. Además, evidentemente, del movimiento de gentes, con españoles casado y emigrados a Portugal y al revés. Seguramente que, si podemos investigar lo suficientemente lejos, todos tenemos algún antepasado portugués.

En cuanto a la cultura, además de tener muchas palabras parecidas, en Portugal también se tocan, como en Peñaparda, panderos cuadrados (que los portugueses llaman “aduffe”). Aunque en Portugal se tocan con la mano en vez de con porra (como hacemos en Peñaparda).

         Y en cuanto a la historia, muchas veces se olvida que los “concelhos” de Almeida y Sabugal pertenecieron a nuestro Reino de León hasta el año 1297, año en que se firmó el Tretado de alcañices por el que esas tierras pasaban al Reino de Portugal (reino que, conviene no olvidar, se independizó del Reino de León). Leonés era, entre otros, el Fuero de Alfayates, hermano (si no hijo) del Fuero de Ciudad Rodrigo. Y estas tierras actualmente portuguesas tienen, con mucho orgullo, su pasado dentro del Reino de León, tanto que en el Museo de Sabugal tienen un apartado entero dedicado únicamente a esta etapa, igual que lo tienen para la época romana o para la guerra de la Independencia.

         Para terminar, decir que muchas veces damos la espalda y miramos por encima del hombro a nuestros vecinos cuando es mucho lo que tenemos en común, tanto que más que vecinos somos casi hermanos. Esperemos que, de aquí en adelante, los miremos a todos con mejores ojos. Y es que, como dice el refrán: “¿Quién es tu hermano? Tu vecino más cercano”.