En honor a las mariposas
Ayer 25 de Noviembre, fue el día internacional
para “la eliminación de la violencia contra la mujer”. La Organización de las
Naciones Unidas, reunida en Asamblea General en diciembre de 1999, aprobó la
conmemoración de este día bajo la propuesta de la República Dominicana y con el
apoyo de 60 países.
En muchas ocasiones, nos preguntamos por qué se establece
una fecha determinada para la Conmemoración de algo que nos parece justo a toda
la Comunidad Internacional. Pues bien, en este caso, ayer se celebró el 53˚
Aniversario del Asesinato de las “Hermanas Mirabal”.
Patria, Minerva y María Teresa Mirabal (“Las Mariposas”)
eran tres hermanas dominicanas de clase acomodada, que lucharon estoicamente
contra el Régimen de Rafael Leónidas Trujillo (1930-1961). Desde su grupo de
oposición “Agrupación política 14 de junio”, llevaron acabo un activismo que
tenía como objetivo evitar el caos al que creían que Trujillo llevaría al país.
Fueron
encarceladas en varias ocasiones, y el dictador quiso conocer personalmente a
aquellas hermanas que tantos trastornos le habían provocado, quedando
fuertemente prendado de la belleza de “Las Mariposas”. Ante la
negativa de éstas a cualquier acercamiento al tirano, fueron violadas y
torturadas de forma sistemática hasta que, finalmente, Trujillo urdió el
asesinato de las tres. Así, las Mirabal, fueron ejecutadas el 25 de noviembre
de 1960, bajo la apariencia de un accidente.
Trujillo
pensaba que se había librado de uno de los grandes problemas a los que se
enfrentaba, pues la historia de las hermanas estaba calando en la conciencia de
la sociedad dominicana.
Sin
embargo, el atentado le ocasionó serios problemas. Es a partir de este momento
cuando comenzó la decadencia de su Régimen, ya que el pueblo dominicano se
mostró cada vez más proclive a apoyar los ideales de “las Mirabal”.
Finalmente
Trujillo fue objeto de una emboscada popular en la que fue ametrallado el 30 de
mayo de 1961.
Hoy en día, la violencia de género representa una de las
grandes lacras a las que nuestra sociedad se enfrenta, y debe ser la Educación,
tanto en el ámbito familiar como escolar, la encargada de reconducir la
situación, a través del fomento de la Igualdad y el Respeto.
Cabe mencionar el primer punto de la exposición de motivos
de la Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección
Integral contra la Violencia de Género: “La violencia de género no es un
problema que afecte al ámbito privado. Al contrario, se manifiesta como el
símbolo más brutal de la desigualdad existente en nuestra sociedad. Se trata de
una violencia que se dirige sobre las mujeres por el hecho mismo de serlo, por
ser consideradas, por sus agresores, carentes de los derechos mínimos de
libertad, respeto y capacidad de decisión”.
Todos nosotros somos responsables de atajar la
vulneración de nuestros Derechos Fundamentales, por ello debemos “Romper el
Silencio” y no quedarnos parados, para que cada día sean honradas “las
Mariposas”.