Fernando Arrabal mejora, aunque sigue hospitalizado en París

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Arrabal y, al fondo, la fallecida Rosa García Cano
AGENCIA EFE
El escritor español Fernando Arrabal, hospitalizado ayer por un problema cardiaco, "mejora" y "recupera todas sus facultades", aunque seguirá internado para someterse a exámenes complementarios.
Arrabal "no para de hacer bromas, lo que muestra bien que su estado de ánimo es bueno y que tiene ganas de recuperarse lo antes posible", señaló la representante.
El escritor, de 81 años, está siendo sometido a exámenes en un céntrico centro hospitalario de París, adonde fue trasladado ayer, tras haber sufrido un ataque cuando se encontraba en su domicilio.
El dramaturgo no perdió en ningún momento el conocimiento, pero la médico que lo atendió en su domicilio aconsejó su traslado a un hospital.
El entorno del escritor indicó que su estado no es crítico.
Arrabal, nacido en Melilla en 1932 e instalado en París desde 1955, tuvo que anular el viaje previsto para hoy a Nueva York, donde iba a recibir el Premio Internacional Gabarrón de las Letras 2013.
El escritor se encuentra acompañado de sus familiares
Arrabal y su relación con Ciudad Rodrigo
Nacido el 11 de agosto en 1932 en Melilla, pasó su infancia en Ciudad Rodrigo, donde se trasladó con su madre tras el arresto de su padre por no querer sumarse al alzamiento nacional, en 1936, y mantenerse fiel a la República.
Un hecho que marcaría la vida del autor de "La torre herida por el rayo", ya que al padre, que le conmutaron la pena de muerte por la de cadena perpetua, se fugó del hospital, donde estaba por una supuesta enfermedad mental, sin que se volviera a saber nada más de él.
Así, en Ciudad Rodrigo, de donde es hijo adoptivo, Arrabal aprendió a leer, escribir y amar, según él mismo ha contado en numerosas ocasiones, gracias a la madre Teresa, su tutora en el colegio de las Teresianas.
Acabada la guerra, se trasladó a Madrid con su madre y sus hermanos. Y es en Madrid donde ya gana un concurso para niños superdotados, y donde realiza sus estudios universitarios hasta que se marcha a Francia.
Ahora solo queda saber si el gran dramaturgo depositará su legado artístico, con obras de Picasso o Dalí, de forma permanente en Ciudad Rodrigo, como ha expresado en muchas ocasiones.